El incremento de casos del gusano barrenador en México ha encendido las alarmas en sectores agropecuarios y de salud pública. Autoridades federales y productores advierten sobre el impacto que esta plaga podría tener en la ganadería y en la economía rural si no se refuerzan las medidas de contención.
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) confirmó que el brote se mantiene bajo vigilancia en varios estados, principalmente en la frontera sur, donde se han detectado animales con lesiones compatibles con la infestación. El organismo aseguró que se están implementando acciones coordinadas con el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) para evitar su propagación.
Gusano barrenador preocupa al sector ganadero mexicano
El gusano barrenador, causado por la larva de la mosca Cochliomyia hominivorax, ataca a animales de granja y fauna silvestre, lo que puede provocar pérdidas económicas significativas. Además, México había logrado erradicar esta plaga en 1991, por lo que el reciente repunte representa un desafío sanitario de alto riesgo.
Por otro lado, asociaciones ganaderas expresaron preocupación por los posibles efectos en la exportación de productos cárnicos y lácteos, sectores que dependen de certificaciones internacionales de sanidad. También solicitaron apoyo para reforzar las campañas de vacunación y vigilancia epidemiológica.
Senasica mantiene un programa de emergencia que incluye la liberación de moscas estériles, monitoreo en puntos fronterizos y capacitación a productores. La meta es contener el brote antes de que alcance regiones del norte del país, donde se concentra gran parte del hato ganadero nacional.