La emblemática marca Ricolino, conocida por dulces como Bubulubu, Paleta Payaso y Duvalín, dejó de pertenecer a Grupo Bimbo. En 2022 Mondelēz International compró la marca por 27 mil millones de pesos mexicanos, equivalentes a alrededor de 1,300 millones de dólares.
Aunque Ricolino generaba unos 500 millones de dólares anuales en ingresos bajo Bimbo, la decisión de venderla obedeció a una estrategia corporativa clara. Bimbo decidió concentrarse en panificación y snacks salados. Mondelēz, por su parte, encontró en Ricolino un activo con fuerte arraigo cultural en México.
Impacto económico y cultural de la venta de Ricolino
Ricolino nació en 1970 como parte de Grupo Bimbo con el propósito de proporcionar confitería accesible y con gran innovación. Además de sus productos clásicos, desarrolló una red logística sólida que le permitió distribuir en toda la república mexicana y en mercados internacionales gracias a la comunidad mexicana en Estados Unidos y Centroamérica.
La transacción incluyó cuatro plantas productoras y una plantilla de más de 6,000 empleados. De igual manera, reforzó la expansión internacional de Mondelēz, que ya gestiona marcas como Oreo, Milka y Trident. Bajo la nueva administración la marca persigue expandirse aún más allá de la región, manteniendo su identidad original.
Por otro lado, esta venta destaca cómo las empresas mexicanas optan por alianzas o adquisiciones para definir su posicionamiento internacional. Ricolino continúa vigente con innovación y preservación de su esencia.
Una cifra que demuestra la magnitud del movimiento indica que la operación de venta de Ricolino a Mondelēz representa uno de los mayores acuerdos recientes en la industria alimentaria mexicana.
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