La situación financiera de Pemex sigue sin mostrar una mejora estructural a pesar del respaldo sostenido del gobierno federal durante la última década. El Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas advirtió que las inyecciones de capital no han corregido los problemas de fondo de la petrolera, que mantiene altos niveles de deuda, pasivos de corto plazo y una débil generación de efectivo en México.
Además, el organismo señaló que los recursos públicos canalizados desde 2015 no lograron modificar la operación financiera de la empresa productiva del Estado. De igual manera, alertó que la dependencia del apoyo gubernamental podría extenderse más allá de 2027 ante la ausencia de cambios profundos en su modelo operativo.
Pemex enfrenta presión por deuda y falta de liquidez
El IMEF indicó que Pemex registra capital negativo cercano a 100 mil millones de dólares, adeudos con proveedores por 28 mil millones y pasivos totales por un monto similar. Asimismo, subrayó que la petrolera no genera suficiente efectivo para cubrir sus compromisos sin recurrir al respaldo federal.
El análisis destacó que la refinación absorbe la mayor parte del flujo disponible, lo que limita la capacidad de pago y prolonga la fragilidad financiera. En consecuencia, mientras persista este enfoque operativo, la empresa seguirá requiriendo recursos públicos de manera recurrente.
Riesgos fiscales y efectos en la calificación soberana
El IMEF anticipó que en 2026 Pemex enfrentará vencimientos de deuda de corto plazo por 20 mil millones de dólares, además de obligaciones con proveedores por otros 28 mil millones. También advirtió que este escenario incrementa los pasivos del gobierno federal en un contexto de bajo crecimiento económico. La petrolera continúa siendo un factor relevante en la evaluación de la calificación soberana de México, lo que mantiene bajo observación su sostenibilidad financiera en el mediano plazo. Esta nota fue elaborada a partir de información del IMEF.






